La dama de blanco, Wilkie Collins


¿Leer una novela inglesa de 1860 con más de 600 páginas? No cabe duda de que más de uno se resistiría a esta idea. Por muchos motivos. En este caso, en cambio, la resistencia no está justificada. La dama de blanco es un clásico casi «imprescindible» para los amantes de diversos géneros literarios. Esta novela, aparecida en fascículos y publicada luego por Charles Dickens, amigo del autor, es un avance de la novela negra, unida a una caracterización excelente de los personajes y una profundidad psicológica extraordinaria. Llevada al cine varias veces, con grandes cambios en general, pues la profusión de personajes y los diversos planos de la trama no permiten una escenificación completa.
Walter Hartright, un profesor de dibujo, asume la enseñanza de dos jóvenes aristocráticas en el castillo de la familia Fairlie. En su camino hacia el castillo, Walter se encuentra en el bosque a una mujer vestida de blanco, que está huyendo de algo o de alguien. Más adelante descubre un parecido asombroso entre esta mujer y una de sus alumnas, heredera de una gran fortuna. Pronto entran en escena otros personajes, sobre todo un conde italiano de gran envergadura y peso, casado con una tía de la alumna.
Los diversos lances de la novela, algunos muy sencillos y otros algo rebuscados, suenan mucho más creíbles que los episodios de otras novelas actuales de este género. La traducción que he leído, versión actualizada de una traducción anterior, es aceptable, aunque no faltan errores.
En cualquier caso, si a alguien no le asustan las novelas largas, se la puedo recomendar.

Lo que opinan los demás:

Walter Hartright se traslada a Limmeridge para dar clases de dibujo a Laura, sobrina y heredera del barón Frederick Fairlie. Sin que ninguno de los dos pueda evitarlo, surge entre ellos un profundo amor, enturbiado por el compromiso de la muchacha con sir Percival Glyde, que solo busca arrebatarle su fortuna. La aparición de una misteriosa mujer, sin embargo, cambiará de forma inevitable el curso de los acontecimientos.La dama de blanco, inspirada en un hecho real y publicada originalmente por entregas en una revista dirigida por Charles Dickens, ha sido un éxito ininterrumpido de ventas en todas las lenguas en que se ha publicado. Ello se debe a una trama sumamente bien llevada, a la atmósfera de misterio e intriga, al trepidante ritmo narrativo y, sobre todo, a la profundidad psicológica de los personajes y la fabulosa descripción de los ambientes y las situaciones. (La Casa del libro)

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