El ancho mundo, Pierre Lemaitre

La trilogía de entreguerras de Pierre Lemaitre describe todo un mundo de corrupción y desorden en la Francia de los años veinte. El ciclo de tres novelas, en el que los protagonistas del primer libro aparecen y desaparecen, parecía concluido hasta la aparición de este nuevo relato. La familia Pelletier dirige con éxito una fábrica de jabones en Beirut a finales de los años cuarenta. Los cuatro hijos toman rumbos muy diferentes. Jean, el mayor, casado con una exigente caprichosa, malvive en París como representante en diversos sectores, y oculta una pasión secreta que no puede dominar. Francois estudia teóricamente en la Escuela Normal de París, aunque en realidad su pasión es el periodismo. Heléne decide un día ir también a París para estudiar Bellas Artes, y Etienne sigue a su antigua pareja, un legionario, a Saigon, en donde los guerrilleros del Viet Minh tienen en jaque a la administración colonial francesa de Indochina.
A partir de esta constelación, Lemaitre lleva al lector a lo largo de todo un mundo de corrupción propiciado por las diversas guerras y constalaciones políticas, bajo el que sufren muchos y del que se benefician unos pocos. Como de costumbre, el autor francés maneja sus cartas con su maestría, manteniendo la intriga hasta el final y describiendo las escenas y situaciones con un cierto toque de ironía, uno de los rasgos característicos de su prosa.
El hecho de que no ganen siempre los buenos, y de que muchos delitos queden impunes, no debe considerarse como una desviación ética sino, al menos desde el punto de vista de Lemaitre, un reflejo del mundo en que vivimos, nos guste o no.