Señora de rojo sobre fondo gris, Miguel Delibes


Este libro de fondo autobiográfico, pese a los cambios de identidad necesarios para atenuar el impacto de un relato tan directo y traumático, es una de las novelas emblemáticas de Delibes. Combina el lenguaje directo con el estilo de monólogo de otra de sus obras, Cinco horas con Mario. El libro recrea la narración del protagonista, dirigida a una de sus hijas, que se encuentra en prisión preventiva por delitos políticos.
El protagonista y relator, un pintor en crisis creativa, se enfrenta a un drama familiar en una época difícil, poco antes de la muerte de Franco y con una hija detenida y pendiente de juicio por sus actividades sindicales. El pintor y su mujer Ana cuidan también de su nieta, hija de la detenida.
La narración sigue el hilo de la historia de su mujer, de su papel en el ámbito familiar y como musa del pintor, con un punto de inflexión radical, cuando a Ana le diagnostican un tumor benigno en el cerebro.
El estilo de Delibes es de sobra conocido. Su sobriedad, unida a un lenguaje cuidado y preciso, es proverbial. Y el tono general, dolido y con tendencias pesimistas, recoge rasgos muy típicos de la idiosincrasia castellana. El «fondo gris» del cuadro contrasta con el vestido rojo del retrato, autor de un pintor amigo de la familia. En su homenaje a su mujer, representada aquí por Ana, Delibes confiesa su incapacidad de crear e incluso casi de vivir sin la ayuda de su mujer, de la que compone un cuadro psicológico a lo largo de las páginas del libro. Excelente narración.

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