La casa del fin del mundo, Dean Koontz


Alguien me recomendó este autor, uno de los escritores de bestsellers más popular en el mundo, y elegí su última obra publicada, La casa del fin del mundo. Eché un vistazo a las reseñas y críticas en Internet y encontré opiniones muy diversas, de modo que decidí leer el libro.
Tengo que reconocer, sin necesidad de incurrir en spoilers, que el libro empieza muy bien, presentándonos a Katie, una mujer en la treintena que ha perdido a sus suegros, su marido y sus hijas a manos de un grupo de matones de barrio y de las intrigas de «gente con poder». Por ese motivo, se ha retirado a vivir a una isla en un lago de los Estados Unidos, donde no tiene relación con ninguna persona y puede dedicarse a la pintura hiperrealista y a un proceso mental de autocuración o, al menos, de acostumbramiento a su nueva vida. Junto a su isla existen otras dos, una habitada por una familia y otra donde tiene su sede un misterioso centro de investigación, supuestamente de una agencia del medio ambiente. La vida, tal como ella la conoce, da un vuelco un día concreto, en que aviones, helicópteros y drones sobrevuelan las tres islas y bombardean el lago con cargas de profundidad. La amenaza que viene de la isla vecina no tarda en asomarse a su puerta.
El comienzo es prometedor, y la sensación de amenaza y angustia está bien creada. Más adelante, la trama se alarga innecesariamente sin añadir nada nuevo ni conducir a un desenlace concluyente, salvo lo que a las dos protagonistas principales se refiere.
Pienso que probaré otra obra de este autor antes de decidir si vale la pena o no seguirle.

Esta entrada ha sido publicada en Novela y etiquetada como . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta