Luna llena, Aki Shimazaki


Aki Shimazaki es una escritora japonesa que, al igual que otros y otras compatriotas, salió de su país y escribe en otra lengua. En este caso, se trata del francés de Canadá. Esta novela, editada hace poco en español, es más bien un breve relato sobre la convivencia, el amor y la capacidad de perdonar, incluso cuando no es posible olvidar.
El matrimonio Tetsuo y Fujiko Niré vive en una residencia, a la que se mudaron para poder contar con asistencia a medida que disminuían sus facultades físicas. Fujiko padece de Alzheimer, de modo que ya no reconoce a muchas personas de su entorno. Un día se despierta y constata con asombro que hay un desconocido en su habitación. A raíz de sus protestas y con la connivencia de Tetsuo, la enfermera jefe le explica que se trata de su prometido, al que conoció en un encuentro concertado, un omiai. Pese a las dificultades que esto conlleva, Tetsuo acepta representar su papel, que se complica a raíz de un recuerdo persistente con una enorme influencia sobre su vida familiar.
La novela es de corte casi minimalista y se limita a los hechos y los pensamientos más relevantes de Tetsuo, que los relata en primera persona.
Las costumbres y el modo de vida japoneses adornan una narración que, en definitiva, podría situarse en cualquier otro país en nuestros días. Muy agradable de leer.

La opinión de los demás:
«Bajo esta prosa notablemente sobria, compacta y controlada, palpita un volcán.» Le Devoir
«Una tierna reflexión sobre el lugar que ocupan los recuerdos.» Le Monde

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