Según explica el autor en el epílogo al libro y en varias entrevistas, esta breve novela debe ser una invitación a leer más, a leer junto con los hijos o con los padres y, en general, a leer libros, desintoxicando la mente de las pantallas y las imágenes que nos invaden a todas horas y desde cualquier lugar.
El hecho de que el público incluya a los más jóvenes se nota tanto en el planteamiento como en la prosa sencilla y, más especialmente, en la elección de los protagonistas. La narradora y principal protagonista es Josephine, una niña de edad desconocida que acude a un colegio de educación especial, donde una maestra da clase a seis alumnos con simpáticas particularidades.
Josephine relata en la novela ante sus padres lo que ha sucedido durante las últimas semanas en su colegio, y especialmente el último día lectivo antes de Navidad, en el que la clase ha visitado el zoológico.
Los razonamientos sencillos y lineales de Josephine, sus observaciones del mundo de los adultos, el intento de inclusión en un colegio «normal» cuando el aula en donde tienen las clases aparece inundada un lunes, y la investigación que emprenden los seis alumnos para descubrir al causante del estropicio son algunos detalles de esta encantadora obra.
La novela es divertida y da mucho que pensar. Una vez más, Dicker demuestra que es posible convertir en literatura casi cualquier tema, siempre que no falten las ideas y el talento.
La opinión de los demás:
«Una voz napoleónica, que no escribe, boxea». El Cultural
«Tan adictivo como para no querer, ni poder parar». La Razón (libro del día)